
Recibí una publicación en mi ‘feed de LinkedIn’.
Una persona expresaba “payasadas” en una publicación. Nunca había recibido una publicación suya. Junto a su publicación, había decenas de comentarios increpando su “falta de profesionalidad”. Varias personas recordaban: “Esto no es Facebook”, precisando a continuación que; “esto es una red profesional”.
Mi primera impresión fue que, efectivamente, la publicación no parecía “muy seria”. Pero no faltaba el respeto a nadie. Sentí curiosidad. Accedí a su perfil para ver el resto de sus publicaciones. Seguían más o menos la misma línea. “Payasos, Gente saltando y brincando, Videos de chistes, Animadores y Animadoras haciendo reír a la gente, Circos, etc…”.
Siempre aparecían varios comentarios recordando que “hay que ser profesionales”.
Algunos comentarios fueron respondidos por esa persona.
Decían: “¡Claro que es profesional lo que digo!”. “Es que soy Payaso. Trabajo en circos y eventos de animación”. “Me dedico a esto”.
… y, a continuación, lo complementaba con un chiste o una broma.
¡Qué equivocado y qué poco profesional fui en mi primera impresión!.
Categorías:Aprendizajes de LinkedIn, La vida misma