
Unos dicen: “Cualquier camino que elijas en la vida será el correcto, siempre y cuando sea tu decisión.”.
Otros replican: “Somos producto de nuestras decisiones, no de nuestras circunstancias. Las decisiones lo cambian todo. Si no te gusta tu vida, es momento de tomar mejores decisiones”.
Y está muy bien dicho.
Cualquier decisión, aunque sea absolutamente incorrecta, es mejor que ninguna decisión.
La “parálisis por el análisis” puede llevarnos al más absoluto desastre.