Llegar a la cima profesional

Un compañero acabó la universidad. Entró a formar parte de una consultora de prestigio. Estaba motivado. Tenía una excelente carrera profesional por delante. Para llegar a ser socio necesitaban 12 años. Trabajó mucho. Se divirtió mucho.
A los 8 años llegó a ser un Manager en Mayúsculas. Cercano a sus proyectos y a sus equipos. Reclamado por sus clientes. Sin miedo a los retos. Alegre, trabajador e ilusionado. Estaba feliz. … y siguió subiendo hasta llegar a los 10 años a Senior Manager. Un buen Senior Manager. Más alejado del día a día de los proyectos y sus equipos. Focalizado en conseguir nuevos proyectos. Hacía bien su trabajo. Pero no se le veía tan alegre. No se divertía tanto.
… y siguió subiendo hasta llegar a los 12 años a Socio de la compañía. Un socio ‘de los muchos’ de la compañía. Alejado de sus proyectos y sus equipos. Focalizado en abrir nuevas líneas de negocio y participar en las decisiones de la compañía. Había conseguido llegar profesionalmente ‘a lo más alto’.
Pero… no estaba alegre. No se divertía.
Reflexionó y se dijo: A los 8 años, cuando era Manager fue cuando llegué a la CIMA de mi carrera profesional. Estaba Feliz. Me gustaba lo que hacía. Me divertía.
En el mundo profesional… no siempre las Cimas están en lo más alto.
Yo no llegué a la cima por culpa de una Thermomix. ¿Quieres saberlo?. Si te apetece mira el siguente artículo: https://wp.me/pbeKqd-5K